Recomienda Sedema proteger sistemas de cosecha de lluvia ante posible caída de ceniza
Ante la reciente actividad del volcán Popocatépetl y la posible caída de ceniza en distintas zonas de la Ciudad de México, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) capitalina, a través de la Dirección General de Coordinación de Políticas y Cultura Ambiental, emite una serie de recomendaciones a las y los beneficiarios del programa Cosecha de Lluvia para garantizar el correcto funcionamiento de su sistema de captación pluvial instalado en sus viviendas.
Debido a la alta relación entre el área de recolección y el volumen del tanque, los cosechadores de lluvia pueden ser vulnerables a la caída de ceniza volcánica; sin embargo, el agua del tanque no representa ningún riesgo para la salud de las personas ya que los elementos que pueden ser liberados de la ceniza (particularmente hierro, manganeso y aluminio) sólo provocan turbiedad y cambio de pH .
Cabe recordar que el agua cosechada mediante estos sistemas nunca ha sido recomendada para beber sino únicamente para llevar a cabo actividades domésticas como lavar la ropa, los trastes, limpiar pisos, bañarse, regar plantas, entre otros usos de aseo doméstico.
En la mayoría de los casos, es poco probable que pequeñas cantidades de ceniza (unos pocos milímetros) vuelvan insegura el agua, sobre todo para usos habitacionales. Con el tiempo, la lluvia fresca diluirá los productos químicos de la ceniza y mejorará la calidad del agua.
A fin de evitar que la ceniza volcánica afecte estos sistemas, se recomienda asegurarse de que el tanque de almacenamiento esté bien tapado, ya que esto evitará el ingreso directo de cenizas y mantener abierta la válvula del separador de primeras lluvias.
Si el sistema de captación pluvial no cuenta con filtro, será necesario apagar la bomba y no usarla hasta que deje de caer ceniza y hasta que el agua dentro del tanque se haya renovado con agua limpia. En este caso, el agua dentro del tanque se puede sacar con el multiconector o llave tapón en la base del tanque de almacenamiento. Es importante tener presente que si se usa la bomba en este escenario, se corre el riesgo de afectarla permanentemente por obstrucción y corrosión de la ceniza; también en el caso de que el sistema cuente con caudalímetro.
En caso de que el sistema sí cuente con filtro de sedimentos, se debe realizar la limpieza de rutina de éste, dos o tres veces al día, dependiendo de la intensidad de la caída de ceniza. Además, se sugiere lavar a fondo y con agua limpia el techo, las canaletas y las bajantes después de que se detenga la caída de cenizas, antes de volver a conectar la bajante al tanque. Finalmente, se pide esperar hasta que la lluvia lave o limpie las cenizas del techo, antes de volver a conectar la tubería descendente al tanque.
Cabe hacer mención que la cosecha de lluvia tiene diversos beneficios ambientales como reducir el flujo de agua a los drenajes, lo que se traduce en menos inundaciones; disminuir la cantidad de energía para bombear y transportar agua a las viviendas, lo que reduce las emisiones contaminantes; contribuye a la no sobreexplotación del acuífero y a su recuperación al reducir la demanda; además de que facilita el acceso al agua en viviendas durante 5 y 8 meses al año.